Antes de elegir a tu nuevo amigo, debes tener en cuenta su tamaño y carácter. Dependiendo de tu estilo de vida será más conveniente uno u otro. Por ejemplo, si vives en un piso pequeño no es recomendable un perro de gran tamaño, ya que se agobiará y no podrá descargar su energía. En este caso, sería más recomendable adoptar un perro adulto de tamaño mediano o pequeño.
Asimismo, debemos tener en cuenta el nivel de actividad que necesita según su raza, mestizaje o edad. No es lo mismo adoptar un perro joven que de avanzada edad.
En conclusión, es importante que su tamaño sea acorde al hogar que vamos a darle, puesto que nos condicionará mucho en sus cuidados y comodidad, así como su necesidad de ejercicio diario, lo cual también dependerá de nuestro estilo de vida. Si lo tuyo es descansar y la vida tranquila, no dudes en adoptar a uno de nuestros ancianitos, ¡son los que más necesitan una familia!
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